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#ZonaLibre | Artistas en política, ¿circo o propuesta seria?

Una desbandada de actores, deportistas y gente del espectáculo busca un puesto público; si los partidos están buscando este tipo de figuras, debe ser porque vivimos una crisis de cuadros públicos.
mié 27 enero 2021 11:59 PM
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Carlos Villagrán, 'Quico', en su pre-registro como candidato a gobernador.

Rolando recibió en sus brazos a su hija, que luego llamaría Guadalupe. En su profunda alegría exclamó “ha nacido la primera mexicana que será Miss Universo", y proféticamente tuvo razón, 23 años después de ese momento Lupita Jones se convertiría en Miss universo, era el 17 de Mayo de 1991, cuando se coronaba en el certamen de belleza más importante del mundo.

Originaria de Mexicali, Guadalupe no era solo un rostro lindo. Había estudiado en San Diego en la escuela de comercio y tenía la idea de trascender en la escena pública. La ciudad de Las Vegas, Nevada le daría esa gran oportunidad.

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En una de las complicadas preguntas finales, le cuestionaron: ¿Cuál es el mayor problema de tu país?, Lupita no dudó en responder: “La negociación del Tratado de Libre Comercio”, pues México no contaba con la misma tecnología que otras naciones. “Estoy segura que esto se resolverá muy pronto”, sentenció.

El hecho de que una mexicana que nunca necesitó la ayuda de una intérprete para hablar en inglés y refiriendo un tema políticamente crucial hizo que los reflectores se reflejaran en los presidentes, tanto de México y de Estados Unidos para lograr el tan positivo TLC que hoy han modificado y nombrado T-MEC.

Han pasado 29 años desde esa hazaña y hoy Lupita Jones es la directora general del concurso en nuestro país. Seguiría siendo un perfil en los tabloides de revista, si no fuera porque en este 2021, tanto el PAN, como el PRI la buscan lanzar para la gubernatura por el Estado de Baja California, para que junto a la alianza que tienen con el PRD puedan vencer a Morena en junio próximo.

Como Jones, una desbandada de actores, deportistas y demás gente del gremio artístico han levantado la mano a fin de ser considerados por el electorado en un puesto público.

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Y no son pocos. Desde Carlos Villagrán, ‘Quico’, un personaje muy querido en la vecindad de ‘El Chavo del Ocho’, que busca un cargo en Querétaro. Como él, Héctor Hernández, cantante y exvocalista de Los Ángeles Azules, quiere la alcaldía de Iztapalapa.

El conductor de televisión Alfredo Adame se registró para buscar la candidatura a diputado federal por el distrito 14 de Tlalpan, por parte de Redes Sociales Progresistas. Y como él, luchadores como “Tinieblas”, en Venustiano Carranza; “Carístico”, en la Cuauhtémoc, y “Blue Demon Jr.”, en Gustavo A. Madero.

Otros deportistas, como el caso de el exfutbolista Francisco Javier “el Abuelo” Cruz que busca una diputación en Nuevo León. Adolfo Ríos, el exguardameta de la Selección Nacional, buscará una vez más una alcaldía, ahora por Movimiento ciudadano y el Partido Verde. Quien fuera su adversario en las canchas, Adolfo 'Bofo' Bautista, busca una diputación federal en Jalisco.

El exentrenador de futbol y actual comentarista deportivo José Luis Sánchez Solá, ‘el Chelís’, fue fichado por Morena para ser candidato a una diputación local. Mientras que Rommel Pacheco también buscará competir por la diputación federal en el Distrito 3 de Mérida, Yucatán, por el PAN.

Pero quizá el revuelo más grande lo ocasionó la cantante Francisca Viveros Barradas, mejor conocida como ‘Paquita la del barrio’, quien será candidata de Movimiento Ciudadano a diputada local en Veracruz. La polémica artista cantó su éxito: “Rata de dos patas” acompañada de mariachis, para luego registrarse como precandidata. Entre lágrimas declaraba: “No sé a qué vengo aquí, yo sólo sé que hay personas atrás de mí que son las que me van a enseñar a manejar este asunto”.

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¿Una oportunidad o decepción?

La política no se devalúa por los personajes que participan en ella. Sin embargo, se debilita cuando los partidos políticos buscan ganar elecciones al costo que sea.

La incursión de artistas y deportistas en política no es algo nuevo en nuestro país, ni en ningún otro que goza de democracia. Pero, ¿qué aportan estas figuras públicas?

Podrían hacer mucho más de lo que imaginamos. Pues si los partidos políticos están buscando este tipo de figuras para promoverlos como candidatos, habla de que vivimos una crisis seria de personajes dentro del espectro político. Durante años, se han propuesto a algunos candidatos acartonados que han sido catalogados como “corruptos, malvados, indolentes, narcisistas, ajenos a los problemas de la gente común”. El artista se convierte en el antítesis del político y eso lo convierte más cercano al político ordinario.

Sin duda hay una crisis en la política mexicana y la farándula está aprovechando dicha situación. Esto habla de un problema generacional muy serio. Pues la ausencia de cuadros y políticos de carrera podría llevarnos a tener pronto a un presidente emanado del negocio del espectáculo, como sucedió con Donald Trump en Estados Unidos.

Que este 2021 sea un año histórico con la cantidad de personajes del medio artístico y deportivo incursionando en política también señala que la democracia funciona y a pesar de toda la frivolidad que podría representar la participación de estas figuras, se debe tomar con el mejor talante, pues si realmente en su rol de artistas tienen la intención de hacer el bien para la gente, se les debe dar el beneficio de la duda, a fin de que busquen con su influencia reivindicar el oficio político tan desgastado y menospreciado en México.

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Nota del editor: Las opiniones de este artículo son responsabilidad única del autor.

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